Clapham y Rowley-Conwy (2007) reportan la presencia de muestras de M. peregrina en Qasr Ibrim, lugar que fuera una vez una ciudad muy importante en lo que hoy es el Lago Nasser en Egipto. Muestran que trazas de frutos de M. peregrina están presentes en un periodo comprendido entre el siglo VII aC. Hasta el año 650 d.C., un periodo sumamente largo de uso documentado de esta planta.
A diferencia de Moringa oleifera, las hojas de M. peregrina no son ingeridas por la gente, aunque en ocasiones se usan para forraje. Los tubérculos de las plantas jóvenes son tostadas, al menos en el sur de Arabia (ver Miller y Morris 1988). Pero son las semillas de M. peregrina las que resultan de interés. Eran usadas, y todavía lo son, en muchos lugares para producir un aceite medicinal y cosmético. Ese proceso será un tema para una entrada posterior en este blog. Mientras tanto, habrá que recordar que cuando los vendedores nos cuentan historias sobre faraones o emperadores cargándose de energía a partir de hojas de Moringa oleifera, están en realidad refiriéndose a una especie de planta distinta.
Referencias
Brun, J. P. 2000. The Production of Perfumes in Antiquity: The Cases of Delos and Paestum. American Journal of Archaeology 104: 277-308.
Clapham, A. J. y P. A. Rowley-Conwy. 2007. New discoveries at Qasr Ibrim, Lower Nubia. Progress in African Archaeobotany, ed. R. Cappers, 157-164. Groningen Archaeological Studies 5.
Linnaeus, C. 1753. Species Plantarum. Laurentius Salvius.
Manniche, L. 1999. An Ancient Egyptian Herbal. British Museum Press.
Miller, A. G. y M. Morris. 1988. Plants of Dhofar. Office of the Adviser for Conservation of the Environment, Diwan of the Royal Court, Sultanate of Oman.